Esta noticia fue publicada originalmente por Casino.org.

Según la UKGC, Greentube no cumplió con sus responsabilidades relacionadas con la supervisión social adecuada y los protocolos contra el blanqueo de dinero (AML).

En concreto, el regulador dijo que los dos sitios habían violado las secciones 12.1.1, 12.1.2, 15.2.1 de las Condiciones de Licencia y Códigos de Práctica (LCCP) y la disposición 3.4.1 del Código de Responsabilidad Social del Reino Unido (SRC).

La sanción por las infracciones asciende a 685.000 libras (912.304 dólares). Las multas se derivan de incidentes que tuvieron lugar entre diciembre de 2019 y noviembre de 2020.

Greentube Alderney es flojo en sus procedimientos de lucha contra el lavado de dinero
La UKGC afirma que Greentube Alderney hizo un trabajo deficiente en el seguimiento de los movimientos de dinero. Tampoco se aseguró de poder hacer un seguimiento adecuado de los riesgos de blanqueo de capitales fuera de las horas normales de funcionamiento.

Al parecer, el operador empleó un enfoque algo desordenado para verificar las fuentes de financiación. Según la UKGC, se basó demasiado en plataformas de datos de código abierto para completar sus comprobaciones.

También se produjeron retrasos “inaceptables” en el tiempo que la empresa necesitaba para confirmar que los clientes que pagaban eran propietarios del método de depósito que utilizaban. La UKGC no detalló cuánto tiempo de retraso hubo, y Greentube no ha explicado cuánto dura el proceso.

El cumplimiento de las normas de la Comisión destinadas a mantener la seguridad de las personas y la ausencia de delitos en el juego no es opcional”, declaró la directora ejecutiva de la UKGC, Helen Venn.

Un individuo conocido como “persona políticamente expuesta” pudo apostar el máximo de 1.000 libras esterlinas (1.330 dólares) antes de que Greentube realizara una comprobación de la fuente de riqueza. La empresa tampoco elaboró una política de evaluación AML necesaria que describa cómo identificar los factores de riesgo de blanqueo de dinero. Esta política es obligatoria, según las directrices de la UKGC.

Greentube había tomado las medidas adecuadas para presentar informes de actividades sospechosas (SAR) con la Agencia Nacional del Crimen, como se requiere. Sin embargo, se saltó un paso y no proporcionó la información a la UKGC en los cinco días siguientes a la presentación del SAR a la agencia.

La infracción de la SRC se debió al enfoque pasivo de la empresa para identificar a posibles jugadores problemáticos. En lugar de supervisar proactivamente a las personas, se basó en un límite general de pérdidas netas de 30 días de 1.000 libras esterlinas en todos los casos.

La UKGC señaló que Greentube debería haber sido más proactiva. Se esperaba que hubiera tenido en cuenta otros factores, entre ellos cuándo y durante cuánto tiempo estaban apostando los jugadores. En lugar de ello, el operador obligaba al individuo a ser el responsable y saber cuándo decir cuándo.