La Ley de Transparencia Corporativa enfrenta obstáculos legales que impiden su aplicación
Esta noticia ha sido publicada previamente por ICIJ.
La implementación de la Ley de Transparencia Corporativa (Corporate Transparency Act, CTA) en Estados Unidos sigue en suspenso a pesar de un fallo favorable del Tribunal Supremo. La normativa, aprobada en 2021, exige que millones de empresas revelen la identidad de sus propietarios reales para evitar el uso de compañías fantasma en actividades ilícitas. Sin embargo, un juez federal emitió una orden judicial en enero que mantiene bloqueada su aplicación a nivel nacional, a pesar de la revocación de una medida similar por parte del Supremo. Como resultado, la Red de Ejecución de Delitos Financieros (FinCEN) ha confirmado que el cumplimiento de la CTA sigue sin ser obligatorio mientras persistan estos desafíos judiciales.
Obstáculos en la lucha contra el blanqueo de capitales
La suspensión de la ley ha generado preocupaciones entre reguladores y expertos en delitos financieros, quienes advierten que la falta de transparencia corporativa dificulta la lucha contra el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo. Sin una base de datos accesible de beneficiarios reales, el anonimato de las empresas facilita el movimiento de fondos ilícitos. A pesar de la intención del gobierno de avanzar con la implementación, los continuos desafíos legales podrían seguir retrasando la entrada en vigor de esta medida clave para la seguridad financiera en EE.UU.
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