Esta noticia ha sido publicada previamente por Reuters.

BitMEX, una de las mayores bolsas de derivados de divisas virtuales del mundo, ha acordado pagar hasta 100 millones de dólares para zanjar las acusaciones de Estados Unidos de aceptar ilegalmente fondos de clientes para comerciar con criptodivisas cuando no estaba registrada para ello, así como de no llevar a cabo la debida diligencia con los clientes.

La Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas de Estados Unidos (CFTC) y la unidad de la Red de Ejecución de Crímenes Financieros (FinCEN) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos alegaron el martes que, durante seis años, BitMEX vendió derivados de criptodivisas a clientes estadounidenses sin registrarse debidamente ante las autoridades de ese país.

Las autoridades estadounidenses dijeron el martes que BitMEX tampoco implementó ni mantuvo programas de cumplimiento adecuados para identificar a los clientes y prevenir el lavado de dinero. La bolsa tampoco informó de las actividades sospechosas, dijeron.

El presidente interino de la CFTC, Rostin Behnam, dijo que el caso refuerza que el mundo de los activos digitales necesita “tomar en serio sus responsabilidades en la industria financiera regulada.”

Las criptomonedas alcanzaron una capitalización récord de 2 billones de dólares en abril, a medida que más inversores abastecían sus carteras con tokens digitales, pero la supervisión del mercado sigue siendo irregular.

Las cinco empresas acusadas de operar BitMEX acordaron pagar 80 millones de dólares para resolver los cargos, con otros 20 millones suspendidos a la espera de revisiones. BitMEX, que no admitió ni negó los hallazgos, dijo que ha tomado una serie de medidas para mejorar su cumplimiento.

“La verificación exhaustiva de los usuarios, el sólido cumplimiento de las normas y la capacidad de lucha contra el blanqueo de capitales no son sólo las características de nuestro negocio, sino que son los motores de nuestro éxito a largo plazo”, dijo Alexander Höptner, director ejecutivo de BitMEX, en un comunicado.

El Departamento de Justicia acusó en octubre a Arthur Hayes, Samuel Reed y Benjamin Delo, que juntos fundaron BitMEX en 2014, y a Gregory Dwyer, su primer empleado y posterior jefe de desarrollo de negocios, de violar la Ley Federal de Secreto Bancario y de conspirar para violar dicha ley.

Un portavoz de los cofundadores, que no fueron parte del acuerdo del martes, dijo que esperaban defenderse en los tribunales.

“Como demostrará su defensa, desde los primeros días de la empresa, los cofundadores trataron de cumplir con la ley aplicable a medida que se desarrollaba en el tiempo”, dijo el portavoz en un comunicado.