Esta noticia fue publicada previamente por elDiario.es.

A Lourdes Conesa una trama corrupta que anidó en el Ayuntamiento de Barcelona le arruinó la vida. Esta arquitecta municipal intentó frenar desde dentro de la institución a la mafia de los pisos turísticos de Ciutat Vella en 2008. Dieciséis años después, y una vez el caso ya tiene sentencia, Conesa ha terminado llevando al consistorio a los tribunales por no protegerla lo suficiente pese a recibir amenazas de los implicados en la trama.

La demanda de Conesa supone un pleito pionero en España sobre cómo las administraciones pueden resarcir a los denunciantes de corrupción. Pero tiene una particularidad que lo hace todavía más inusual: fue el propio Ayuntamiento de Barcelona quien, en el año 2022, abrió, por iniciativa propia (y no porque lo pidiera la arquitecta), el expediente de responsabilidad patrimonial para indemnizarla.

Consulte la noticia original si desea conocer más.