La SFO planea incentivar la autorrevelación corporativa
Esta noticia ha sido publicada previamente por The Guardian.
La Oficina de Fraudes Graves del Reino Unido (SFO, por sus siglas en inglés) está desarrollando una nueva política que permitiría a empresas evitar el enjuiciamiento penal si informan de forma proactiva sobre actividades delictivas detectadas internamente. Bajo esta propuesta, las compañías que colaboren voluntariamente con las autoridades y presenten pruebas sustanciales de irregularidades cometidas por empleados o directivos podrían beneficiarse de acuerdos extrajudiciales y sanciones reducidas.
La medida busca fomentar una cultura de cumplimiento preventivo, en la que las empresas actúen con transparencia frente a posibles casos de fraude, corrupción o blanqueo de capitales. La directora de la SFO, Lisa Osofsky, ha defendido que este enfoque alineará al Reino Unido con otras jurisdicciones como EE. UU., donde este tipo de incentivos ya ha dado resultados positivos.
Un nuevo enfoque en la lucha contra el crimen corporativo
La estrategia se centrará en recompensar la cooperación temprana, el acceso a información clave y la implementación de medidas correctivas internas. Aunque aún se están definiendo los criterios exactos, los expertos prevén que esta política aumentará las autodenuncias corporativas y fortalecerá la capacidad del gobierno para perseguir delitos económicos complejos. También se espera que tenga un impacto importante en sectores como el financiero, tecnológico y energético.
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