Este post proviene de esta fuente de noticias

La Policía Metropolitana de Budapest (Budapesti Rendőr-főkapitányság), con el apoyo de Europol, desmanteló una organización delictiva dedicada al blanqueo de capitales y a la comisión de fraudes utilizando documentos administrativos.

La investigación descubrió que los miembros de la red delictiva crearon una serie de empresas sin actividades económicas significativas y adquirieron otras con el uso de testaferros. Los sospechosos abrieron cuentas bancarias a nombre de estas empresas para utilizarlas en cadena dentro de un esquema de blanqueo de capitales. Las cuentas bancarias recibían transferencias de otras cuentas radicadas en diferentes países; estos activos solían proceder de fraudes de facturas o de estafas relacionadas con la criptomoneda. Las sumas se transferían luego a otras cuentas para ocultar la identidad de los propietarios de estos fondos.

Se estima que la red delictiva está activa desde septiembre de 2020 y se sospecha que ha blanqueado millones de euros de ganancias delictivas. Más de 44 millones de euros se han recibido en cuentas vinculadas al grupo criminal, mientras que ya se ha identificado el origen delictivo de otros 5 millones de euros.

La investigación descubrió a 44 personas implicadas en estas actividades delictivas, 10 de las cuales organizaban la actividad, mientras que 34 actuaban como testaferros. Los testaferros, generalmente procedentes de un entorno socioeconómico más vulnerable, facilitaban su información personal a cambio de una mínima compensación. En algunos casos, también colaboraban con los miembros de la red delictiva mientras retiraban y transportaban activos por su cuenta. Los testaferros, que sólo se relacionaban con la trama a través de los reclutadores, participaban principalmente en el proceso de blanqueo de capitales, a diferencia de los fraudes cometidos fuera de Hungría.

Consulte la noticia original si desea conocer más.